El «defecto fatídico» en el contexto del acoso laboral o mobbing se refiere a un concepto legal que se utiliza en algunos sistemas judiciales para establecer la responsabilidad del empleador en casos de acoso laboral. Este término fue popularizado por el profesor italiano Domenico De Masi en su obra «La trampa de la felicidad» (1994), aunque su aplicación específica en el ámbito legal puede variar según el país.
Bajo esta perspectiva, el «defecto fatídico» implica que el empleador es considerado responsable de no haber prevenido o detenido el acoso laboral si no ha implementado medidas adecuadas para prevenirlo, a pesar de que podría haberlo anticipado o conocido. En otras palabras, se trata de una falla del empleador en su deber de proteger la salud y el bienestar de sus empleados en el lugar de trabajo.
Este concepto reconoce que los empleadores tienen la responsabilidad de proporcionar un entorno de trabajo seguro y saludable, lo que incluye proteger a los empleados del acoso y tomar medidas para prevenirlo o abordarlo si ocurre. Si un empleador no cumple con esta responsabilidad y se produce acoso laboral en el lugar de trabajo, el «defecto fatídico» puede ser utilizado para establecer su responsabilidad legal en algunos sistemas judiciales. Sin embargo, las leyes y prácticas específicas relacionadas con el acoso laboral pueden variar según el país y la jurisdicción.