Por: Dr. Fernando Giusio
Un informe de la Academia Americana de Oftalmología (AAO) indica que la gran mayoría de las lesiones en los ojos asociadas al deporte se puede evitar al llevar la protección adecuada.
La entidad recuerda que cada año, unas 100.000 personas se ven perjudicadas por ellas. Cerca de 13.500 de estas heridas resultan en la pérdida permanente de la visión.
El básquet una de las disciplinas en las que las lesiones en los ojos son más frecuentes, con un estimado de 6.000 daños asociados a su práctica, que van desde una lesión corneal superficial hasta una fractura orbitaria.
El mecanismo de producción de la lesión ocular puede ser “contuso”, cuando el ojo se golpea con un objeto romo, se comprime y retrae súbitamente. En este caso puede acumularse sangre debajo del área afectada, y desencadenarse síntomas habituales del traumatismo ocular, tales como hematoma (ojos morados), cortes en el párpado, ojo rojo, hinchazón, hemorragia entre la córnea y el iris (conocida como «hipema»), desprendimiento de retina, visión borrosa o nublada y visión doble entre otros.
También el mecanismo puede ser “penetrante”, cuando la injuria rompe los tejidos oculares y llega al interior del ojo con la consecuente pérdida de sustancia del globo hacia el exterior.
Según el informe de la AAO los médicos oftalmólogos señalan que el 90% de las lesiones en los ojos relacionadas con el deporte se puede prevenir con uso de protección para los ojos con los requisitos establecidos por el organismo de certificación. Los niños deben ser especialmente diligentes acerca del uso de estos productos.
Para el básquet, los deportes de raqueta, el fútbol y el hockey sobre césped, es necesario usar gafas de protección con lentes de policarbonato. Para el béisbol y el hockey sobre hielo, lo más recomendable es llevar un casco con una máscara de ese mismo material o con escudo de alambre.
Los atletas que usan lentes de contacto o anteojos también deben emplear gafas de protección adecuadas. Mientras que los deportistas que sólo tienen un ojo funcional no sólo deben usar protección, sino también evitar ciertas disciplinas como el boxeo y las artes marciales.
Por otra parte, el tratamiento de los traumas oculares es variado. En casos leves, como un ojo morado, aplicar frío en la zona afectada puede ayudar a reducir la hinchazón y permitir una mejoría con mayor rapidez. Sin embargo, incluso en esos casos en los que el traumatismo parece leve, la lesión ocular debe recibir atención médica siempre. En los casos más graves puede ser necesaria inclusive la cirugía oftalmológica
El su informe la AAO concluye que proteger los ojos mientras se practican deportes es también proteger el futuro del deportista, ya que daños pueden provocar consecuencias de por vida.
* El doctor Fernando Giusio es Jefe Sección Oftalmología Legal y Ocupacional del Servicio de Oftalmología del Hospital Italiano de Buenos Aires.