El único tratamiento efectivo para la deshidratación es reponer los líquidos perdidos y electrolitos que se pierden. El mejor método para el tratamiento de deshidratación depende de la edad, la gravedad de la deshidratación y su causa.
Tratamiento de la deshidratación en niños enfermos
Su médico puede ofrecer sugerencias específicas para el tratamiento de la deshidratación en el niño, pero algunas pautas generales son las siguientes:
- Use una solución de rehidratación oral. A menos que su médico le aconseje lo contrario, utilice una solución de rehidratación oral para bebés y niños que tienen diarrea, vómito o fiebre. Estas soluciones contienen agua y sales en proporciones específicas para reponer ambos fluidos y electrólitos. También están diseñados para facilitar la digestión. Productos de rehidratación oral están disponibles en la mayoría de las farmacias, y muchas farmacias de realizar sus propias marcas. Comience la administración de líquidos temprana en el curso de una enfermedad en lugar de esperar hasta que la situación se hace urgente.
- En una situación de emergencia en una solución pre-formulado no está disponible, usted puede hacer su propia solución de rehidratación oral mediante la mezcla de sal 1/2 cucharadita de 6 cucharaditas rasas de azúcar y 1 litro (aproximadamente 1 cuarto de galón) de agua potable. Asegúrese de medir con precisión porque las cantidades incorrectas pueden hacer que la solución menos eficaz o incluso perjudicial. Si es posible, pídale a alguien que compruebe sus medidas de precisión.
- Cualquiera que sea alternativa que usted elija, asegúrese de darle una solución suficiente. Su médico puede sugerir las cantidades específicas, dependiendo de la edad de su hijo y el grado de deshidratación, pero una regla general es mantener administrar líquidos lentamente hasta que la orina de su hijo se convierte en un color claro. Cuando su niño está vomitando, trate de darle pequeñas cantidades de una solución a intervalos frecuentes – tratar una cucharada más o menos cada pocos minutos, por ejemplo. Si su hijo no puede asistir a esta, espere de 30 a 60 minutos y vuelva a intentarlo. Líquidos a temperatura ambiente son los mejores.
- Continuar con la lactancia. No interrumpir la lactancia cuando el bebé está enfermo, sino que ofrecen a su bebé una solución de rehidratación oral en un frasco también. Si usted le da fórmula a su bebé, trate de cambiar a uno que es libre de lactosa hasta que la diarrea mejora – a la lactosa puede ser difícil de digerir durante la diarrea, empeorando la diarrea. Nunca diluya la fórmula más de las instrucciones aconsejan. Su médico también puede sugerir la sustitución de una solución de rehidratación oral para la fórmula de 12 a 24 horas.
- Evite ciertos alimentos y bebidas. El mejor líquido para un niño enfermo es una solución de rehidratación oral – agua corriente no proporciona los electrolitos esenciales, y aunque las bebidas para deportistas reponer los electrolitos, que sustituyen a los perdidos a través del sudor, no a través de diarrea o vómitos. Evite darle a su hijo leche, refrescos, bebidas con cafeína, jugos de frutas o gelatinas, que no eximen a la deshidratación y que pueden empeorar los síntomas.
El tratamiento de la deshidratación en los adultos enfermos
La mayoría de los adultos con insuficiencia renal leve a moderada deshidratación por diarrea, vómitos o fiebre pueden mejorar su estado bebiendo más agua. El agua es el mejor porque otros líquidos, como jugos de frutas, bebidas gaseosas o café, pueden empeorar la diarrea.
Tratamiento de la deshidratación en los atletas de todas las edades
Para el ejercicio relacionado con la deshidratación, el agua fresca es su mejor apuesta. Las bebidas deportivas que contienen electrolitos y una solución de hidratos de carbono también puede ser útil. No hay necesidad de tabletas de sal – la sal en exceso puede conducir a la deshidratación hipernatrémica, una condición en la cual su cuerpo no sólo es la escasez de agua, pero también lleva a un exceso de sodio.
Tratamiento de la deshidratación severa
Los niños y adultos que están gravemente deshidratados deben ser tratados por el personal de emergencia que llegan en ambulancia o en una sala de emergencias de un hospital, donde puedan recibir las sales y líquidos a través de una vena (vía intravenosa) en lugar de por vía oral. Hidratación intravenosa provee al cuerpo con el agua y los nutrientes esenciales con mayor rapidez que las soluciones orales hacer – algo que es esencial en situaciones que amenazan la vida.