El niño en etapa escolar comprende de los 6 a 12 años. En esta etapa comienza el segundo brote de crecimiento que se acentúa con la adolescencia; por tal motivo, el niño sufre muchos cambios, los cuales se lograran satisfactoriamente si el niño lleva una buena alimentación. El gran reto en esta etapa es consolidar los hábitos que se han ido adquiriendo hasta ahora y al igual que en preescolar, en está pueden presentarse situaciones que dificulten la alimentación, como la vista anteriormente, donde el niño no desea comer, por ello se recomienda seguir aplicando las técnicas antes mencionadas. Es muy importante que el niño tenga una alimentación adecuada para su aprovechamiento escolar; por tal motivo, el desayuno es el alimento más importante del día. Su aporte calórico del día debe ser de 2000 kcal aproximadamente, las cuales deben distribuirse en 5 comidas.
Entre los nutrimentos que no deben faltar, pues son importantes para un correcto crecimiento están los siguientes: • Hierro: Hígado, carnes magras, yema de huevo, chaya, cereales, leguminosas y oleaginosas (pepitas). Importantes para evitar la anemia en esta edad. • Vitamina C: Frutas cítricas y verduras. Importante para la absorción de hierro. • Zinc: Arroz, huevo, pescado, avena, cacahuate, fríjol. Importante para el crecimiento. • Calcio: Tortilla de maíz, sardinas, quesos, leche, epazote y hoja de chaya. • Vitamina D: Yema de huevo, leche fortificada, pescado y exponiéndose al sol. Muy importante para la absorción y fijación de calcio. • Vitamina A: Hígado, huevo y frutas naranjas o amarillentas. • Ácido Fólico: Hígado, leguminosas (fríjol), hojas verdes de las verduras (chaya). Durante esta etapa es importante vigilar los alimentos que consumen en la calle, de preferencia que sean alimentos hechos en casa.
Evitar el consumo de refrescos embotellados, frituras, dulces y alimentos con alta densidad energética, debido a que son poco nutritivos y crean malos hábitos en la alimentación. Asegurar una alimentación variada comiendo de todo, sin abusar de nada. Procurar establecer horarios regulares de comidas.
