Los agonistas del receptor del péptido similar al glucagón tipo 1 (GLP-1) son una clase de medicamentos utilizados en el tratamiento de la diabetes tipo 2. Estos fármacos funcionan aumentando la secreción de insulina en respuesta a los niveles elevados de glucosa en sangre y también reduciendo la producción excesiva de glucosa por parte del hígado. Además, retardan el vaciamiento gástrico, lo que ayuda a controlar los niveles de glucosa en sangre después de las comidas. Los agonistas del receptor GLP-1 también pueden tener efectos beneficiosos sobre el control del peso, ya que pueden reducir el apetito y promover la pérdida de peso.
Algunos ejemplos de agonistas del receptor GLP-1 incluyen exenatida, liraglutida, dulaglutida y semaglutida. Estos medicamentos pueden administrarse mediante inyección subcutánea diaria, semanal o mensual, dependiendo del fármaco específico.
En la clínica, los agonistas del receptor GLP-1 se utilizan como parte del tratamiento para la diabetes tipo 2, tanto como monoterapia en pacientes que no pueden tolerar o no responden adecuadamente a otros medicamentos antidiabéticos, así como en combinación con otros agentes hipoglucemiantes, incluyendo metformina, sulfonilureas, inhibidores de la dipeptidil peptidasa-4 (DPP-4) y análogos de la insulina.
Es importante tener en cuenta que estos medicamentos pueden tener efectos secundarios, como náuseas, vómitos, diarrea y, en algunos casos, pancreatitis aguda. Por lo tanto, es crucial que los pacientes sean supervisados de cerca por un médico mientras estén en tratamiento con agonistas del receptor GLP-1. Además, estos fármacos pueden tener interacciones con otros medicamentos, por lo que es importante informar a su médico sobre todos los medicamentos y suplementos que esté tomando.