Hago dieta y ejercicio (sobre todo, abdominales), trato de comer de forma saludable y beber agua… pero igualmente mi vientre hinchado es una pesadilla.
Esto es una realidad para muchas personas (sobre todo notado por las mujeres) y no encuentran una razón aparente a su problema. En este artículo te contaremos por qué se hincha el vientre y qué hacer para reducirlo.
Vientre hinchado: incomodidad e insatisfacción
Tener el vientre como un globo es realmente incómodo y nos hace sentir mal en verano cuando queremos lucir un traje de baño o usar ropa más ajustada al cuerpo.
Y lo peor de todo es no saber los motivos de la hinchazón para poder evitarlos o reducirlos.
Básicamente los responsables son la dieta, la mala digestión y la acumulación de gases.
Presta atención a las causas del vientre hinchado:
Comer deprisa
Al momento de ingerir alimentos (en cualquier momento del día): ¿masticas bien cada bocado o, básicamente, tragas sin respirar?
Aquellos que comen deprisa y recién se detienen cuando se sienten repletos multiplican su riesgo de padecer sobrepeso.
En parte, esto se debe a que el cerebro necesita alrededor de 20 minutos para darle la señal al estómago de que está lleno. Cuando se come muy rápido el hambre continúa aun después de varios bocados o raciones.
Por otra parte, este hábito hace que traguemos más cantidad de aire, el cual se acumula en el vientre y, por ende, se hincha.
Cuando no masticamos bien los alimentos repletos de hidratos de carbono llegan al estómago casi intactos y no contienen la saliva necesaria para predigerirse. Así, la fermentación estomacal se traduce en inflamación y en gases.
Consumir frituras
La comida basura es la causa número uno de muchos problemas y enfermedades actuales. Los fritos, rebozados y empanados nos provocan hinchazón (entre otras patologías).
La manera de cocinar los alimentos tiene mucha relación con cómo nos sentimos después de comer.
Cuando la comida ha absorbido aceite este se dirige al estómago y ralentiza el proceso de digestión. Por ello tras las frituras podemos sentirnos hinchados o con poca capacidad para realizar nuestras actividades.
Beber refrescos
Las burbujas hinchan el vientre. Eso no es una novedad. Entonces, ¿por qué seguimos consumiendo refrescos o aguas gasificadas? Claro, porque nos encantan.
Si además del gas tenemos en cuenta el azúcar, todas esas calorías vacías contribuyen a ganar peso. Si se toman estas bebidas durante las comidas la sensación de hinchazón será mayor.
¡Incluso al elegir bebidas light!
Ingerir fibras de manera incorrecta
Tanto el exceso como la falta de fibras nos hace lucir un vientre inflamado. Si no comemos las suficiente, sufriremos estreñimiento. No ir al baño periódicamente se traduce en abdomen hinchado.
Muchas personas cometen el error de comer demasiadas fibras, que también es malo para la salud.
¿Por qué? Porque causa diarrea que, además de ser molesta, también causa hinchazón.
Problemas digestivos
Algunos le dicen “falta de fuerza enzimática o digestiva” y significa que el estómago no tiene la capacidad para digerir los alimentos como corresponde.
Quizás pueda deberse a un problema de salud innato de la persona pero, en la mayoría de los casos, está provocado por los alimentos que comemos.
Si nuestra dieta está basada en alimentos refinados como las harinas (pan, galletas, pasta) y el azúcar, las enzimas tienen que hacer demasiado esfuerzo para digerirlos.
Esta sobrecarga (por llamarla de alguna manera) va reduciendo no solo la eficacia, sino también la cantidad de elementos encargados de la digestión.
Si no digerimos por completo la comida esta se descompone en nuestro interior y puede derivar en la aparición de gases, dispepsias y, por supuesto, hinchazón.
Comer verduras siempre cocidas
Con la cocción de la comida podemos quitarle todos los nutrientes y enzimas. El calor “mata” las vitaminas y proteínas de las verduras y, al llegar al estómago, los jugos gástricos deben trabajar mucho más para descomponerlas.
Intolerancias a ciertos alimentos
Tal vez seamos intolerantes a un alimento en particular y no lo sabemos, y su ingesta nos provoca hinchazón en el vientre.
La celiaquía (intolerancia al gluten) y la intolerancia a la lactosa son las dos más comunes pero hay más. Causan digestiones lentas, diarreas o estreñimiento, náuseas, gastritis y vómitos.
Mala postura
Si nos pasamos todo el día con el cuerpo encorvado hacia adelante no solo nos dolerán la espalda y las cervicales, sino que también luciremos un vientre abultado.
¿Por qué? Porque la faja natural del cuerpo se va “debilitando” y la barriga expandiendo.
Retención de líquidos
La hinchazón del vientre no se debe únicamente a la comida sólida, sino también a los líquidos que se acumulan en el organismo. Un claro ejemplo sucede con las mujeres durante el período menstrual.
Las hormonas retienen líquidos y, si a eso le sumamos la poca o nula ingesta de agua y el consumo de alimentos salados (o mucha cantidad de cualquier comida), la situación empeora.
Sedentarismo
Es verdad que muchas veces hacemos ejercicio y adelgazamos otras partes del cuerpo y no el abdomen. Sin embargo, peor es quedarse en casa tumbado en el sillón.
La grasa del abdomen debilita los músculos de la zona y cada vez nos es más difícil “mantenerlos a flote”.
Tips para reducir el vientre hinchado
Estos consejos te pueden ser de vital utilidad si quieres eliminar la hinchazón de estómago:
- Come raciones pequeñas.
- Consume ensaladas frescas y frutas crudas.
- Descarta intolerancias a ciertos alimentos.
- Evita los refrescos y bebe mucha agua.
- Prueba una dieta baja en hidratos de carbono y reduce la ingesta de azúcares.
- Evita el estreñimiento.
- Haz ejercicio 3 veces por semana.