Por Miguel Cetina Medina
En diferentes estudios se ha evidenciado el aumento del estrés oxidativo en el desarrollo de la diabetes tipo 2 (DM2), y un incremento de radicales libres a la par de la gravedad de la enfermedad. Esta condición llevará a un daño celular, a disfunción enzimática, al desarrollo de la resistencia a la insulina y podría explicar la presencia de inflamación en la DM2. Una de las alternativas que se han estudiado para contrarrestar el desarrollo y el impacto de la DM2 son los probióticos, los cuales han demostrado grandes beneficios para la salud cuando se han administrado para controlar problemas como la diarrea, estreñimiento, infecciones urinarias, colon irritable, diabetes entre otras. Se han estudiado diversas cepas de probióticos, siendo las de los Lactobacillus las más estudiadas, donde han demostrado su relación con la disminución de los marcadores de estrés oxidativo, e incluso, en modelo animales, se ha relacionado su consumo con efectos antidiabéticos. De igual manera, se ha documentado un cambio en la microflora intestinal de los pacientes con DM2 por lo que se sugiere que al modificar la misma se podrán tener efectos en la regulación de la glucosa. En un estudio liderado por Ejtahed se buscó probar la relación entre el consumo de probióticos (L. acidophilus La5, Bifidobacterium lactis Bb12) y el control de la glucosa, así como el estado antioxidante en 60 pacientes con DM2, con un Índice de Masa Corporal (IMC) menor a 35 Kg/m² y sin ninguna comorbilidad presente. El estudio tuvo grupo control y experimental, brindando a ambos un yogurt con contenido de macro- y micro- nutrimentos sin diferencia significativa, con la única diferencia de que el yogurt del grupo control se encontraba enriquecido con los probióticos antes mencionados. Al inicio del estudio no existía diferencia significativa entre los niveles de glucosa en sangre, la hemoglobina glucosilada (HbA1c), y concentración de insulina entre los grupos control y experimental. Al finalizar el estudio, la glucosa en ayunas y la HbA1c se encontraron disminuidas significativamente en el grupo de intervención en comparación con el de control, sin embargo los niveles de insulina no presentaban un cambio significativo entre los grupos, y únicamente se encontró una disminución significativa en la enzima superóxido dismutasa (SOD). Este estudio demostró el efecto de los probióticos en el tratamiento de la diabetes, así como en la disminución de los marcadores del estrés oxidativo. Aún son necesario más estudios que analicen los efectos de los probióticos en la diabetes, sin embargo el trabajo de Ejtahed y cols., brinda un importante primer paso para evidenciar en humanos el efecto de los probióticos.